En LC el tercer humedal de importancia del estado

Lázaro Cárdenas, Michoacán.- Esta entidad, en Lázaro Cárdena, específicamente en la Laguna Costera El Caimán, tiene a uno de sus nueve humedales protegidos. El tercero por su extensión aunque de mayor valor biológico.

Los humedales son considerados de los entornos más productivos, ya que dan origen a una gran diversidad biológica de la que dependen innumerables especies animales y vegetales; sirven como espacios de recarga de agua, mitigan los efectos de los fenómenos meteorológicos, además de regular el clima, por lo que su conservación es vital para los seres vivos.

México es uno de los grandes proveedores de agua dulce a nivel mundial y su potencial asciende si se considera que ocupa el segundo lugar en humedales o “bosques de agua” en diferentes estados de la república entre los que Michoacán ocupa el décimo lugar.

De acuerdo a las cifras del Instituto Nacional de Estadística, Geografía e Informática (Inegi), en la actualidad México cuenta con 138 humedales protegidos por la convención Ramsar que suscribió México el 2 de febrero de 1971, que representan una extensión territorial que supera los 9 millones de hectáreas, que equivalen a cerca del 5% del territorio nacional.

Ante su potencial en la producción de agua dulce y ecosistemas, se ubica principalmente en los estados de Baja California Sur, Sonora, Sinaloa, Jalisco, Michoacán, Chiapas, Quintana Roo, Yucatán y Veracruz, entre otras, que en conjunto representan cerca del 5% de los humedales protegidos Ramsar, que se ocupa de los humedales y los recursos hídricos.

En Michoacán, se ubican nueve de los humedales protegidos por la convención Ramsar que abarcan una superficie total de 122 mil 677.73 hectáreas.

El mayor de ellos, se ubica en los linderos con el estado de Jalisco, en la llamada Cuenca de Chapala e incluye a los municipios michoacanos de Cojumatlán de Régules, Venustiano Carranza y Briseñas, donde, en medio de pelícanos borregones, este 2018 fue celebrada la efeméride por ProAm.

En orden de importancia por su extensión territorial, le siguen los humedales protegidos de la Cuenca del Lago de Pátzcuaro con una superficie de 707 hectáreas que se distribuye entre los municipios de Pátzcuaro, Quiroga, Tzintzuntzan, Erongarícuaro, Tingambato, Huiramba y Nahuatzen.

El tercer sitio en importancia, está aquí en Lázaro Cárdenas, en la Laguna del Caimán, que como todos estos humedales sufre impactos negativos por descargas de aguas negras, quemas intencionadas para aprovechamiento de espacios y relleno paulatino tolerado por las autoridades, ya que escombros y basura por toneladas se le depositan anualmente.

En el municipio de Aquila los humedales protegidos cubren una extensión total de 433.75 hectáreas, y se ubican en las playas Mexiquillo, Colola y Maruata.

Además de esos humedales protegidos, la entidad cuenta con una vasta riqueza que se encuentra a la espera de la acción por las autoridades en la materia. Destacan los lagos de Zirahuen y Cuitzeo, donde urgen las acciones ante pérdida de la superficie y la profundidad del espejo de agua hasta en un 60%, además de que el crecimiento poblacional y la contaminación producto de las actividades agrícolas, amenazan su permanencia.

Hay programas internacionales, fundaciones y alianzas con recursos disponibles –BID y ONU, por ejemplo– para preservar estos parajes por la importancia de sus componentes, empezando por el agua dulce, sin embargo el deterioro avanza.

Mientras llegan las posibles actuaciones de rescate, los irreemplazables ecosistemas de humedales están sufriendo impactos negativos de enorme magnitud, muchos irreversibles, a manos de intereses particulares y sectoriales a los que parece no importar el interés general ni la salud que tanto dependen del agua.