Los atracos al Capalac y el pleito Itzé – Peraldí

Por el Señor Suárez

Estimados amigos costeños, después de haber estado de asueto por unos buenos meses (cuatro los dejé descansar) en mi querido Apatzingán, considerando mi edad ya avanzadona, es para mi muy lastimoso regresar y ver con mucha preocupación, que en esto de la política porteña, las cosas van de mal en peor en este desgobierno municipal.

Es evidente que nuestra flamante presidenta está echando a la basura las esperanzas y expectativas que los costeños habíamos puesto en ella para que realmente se diera en estas latitudes una cuarta y hasta quinta transformación verdadera.

Y no, lo que hasta ahora se ha obtenido como resultados pírricos de quinta y hasta sexta calidad, como los que nos presentan los números y los análisis que hacen a diario los que conocen de los entresijos de la grilla barata ejercida por esta dama dentro de nuestro palacio municipal.

Y tal preciara, que esta nuestra primera dama ni cuenta se da aun de todas las metidas de pata y topes que da y que está dando a cada paso, como diría mi tío Chon, aunque en la vulgaridad de su léxico florido, algo que traduciré como esta dama anda como Chivo en Cristalería.

Existen muchas evidencias que muestran esta triste realidad y un negro panorama en los días por venir.

Y para muestra uno de tantos botones: El pleito que ya tiene muy anquilosado nuestra flamante presidenta municipal, en una total obcecación que raya en vendetta personal y en un ridículo capricho para quitarle poder al Síndico Municipal.

Como diría el padre de la iglesia de mi barrio “y esto no es nada, pues se verán cosas peores”, nunca en mi experiencia como avecindado en este municipio y de estar viendo muy de cerca y convivir con varios de los viejos políticos, vi a un cabildo queriendo doblegar a un síndico municipal, que al igual que ellos como órgano colegiado está mandatado única y exclusivamente por la ley orgánica municipal.

Pero en fin, en esta transformación de quinta, que está haciendo de este desgobierno municipal, de la presidenta municipal y sus esbirros, nos debe quedar claro que ya no hay que esperar buenos resultados.

Y así, este es el estilo que les está imponiendo, la presidenta municipal a funcionarios y funcionarias de primer nivel.

Ahí, los escandalosos exabruptos de la Oficial Mayor del ayuntamiento, a quien el síndico municipal calificara de neófita e ignorante de la ley.

Sin embargo, ella ha salido muy buena actriz de teatro y dominante de las artes histriónicas para hacer aspaviento e inculpar de acoso y de golpeadores a sus adversarios, todo con el beneplácito de la patrona.

Y muy por el estilo de esta actriz de telenovela de la Oficialía Mayor, se encuentra también la administradora del Capalac, otra funcionaria actriz remasterizada muy cercana a la patrona presidenta y que curiosamente a su arribo hace unos meses a este puesto en sistema de agua, cuentan las malas lenguas, que han sucedido ya cuatro robos o asaltos.

El monto que ha cambiado de manos asciende a un millón de pesos.

El botín, se ha obtenido de planeados golpes tanto en la planta potabilizadora, en la caja de una de las colonias, en la entrada del banco donde los empleados recolectores del dinero acuden a depositar y otro asalto según platican perpetrado a la propia  funcionaria de Capalac, sin precisar el lugar.

Pero todos estos atracos comentan que han tenido una peculiaridad; los asaltantes han llegado y exigen los paquetes de dinero por los cortes de caja de cada lugar.

Lo curioso de los casos es que la funcionaria administradora, es la única que sabe cuánto se recupera de los cortes en cada caja de cobro.

Los que conocen y conviven con esta mujer, coinciden en que es una persona muy exagerada y fantasiosa en su actuar, pues ella asegura que ha sido golpeada,  perseguida y amenazada de muerte a raíz de los robos en el Capalac.

Algunos empleados comentan muy a hurtadillas, que ella misma se autorobó y ha creado una cortina de humo con sus fantasiosos cuentos chinos por lo que exigen a la patrona, que se le investigue a fondo a esta nueva actriz del teatro del desgobierno de Itzé y que no agarren chivos expiatorios en este problema.

Pues ya ni qué decir, este barco de la democracia y de la transformación. Ya está haciendo agua y no se ve como se corrija el rumbo de desastre que se ve en el horizonte.

Pareciera no haber una salida que beneficie a todos los que aquí cohabitamos, salvo que los gurús de Morena en las altas esferas, den un golpe preciso y conciso de timón para medio enderezar y terminar en buen puerto.

De otra forma, esta mujer, la patrona presidenta, seguirá dando mucho de qué hablar con sus actrices de telenovela y su séquito de esbirros que interpretan las leyes a su manera, como ya los ha balconeado el Síndico en todos los escenarios donde ha tenido oportunidad. Incluso con el mismo Presidente de la República, Andrés Manuel.